¡Triunfazo!
Triunfazo
Por: Daniel García
En un partido especial, el Deportes Tolima logró nuevamente una
victoria en territorio antioqueño. Y es algo que está quedando en los libros de
la historia en el historial de enfrentamiento entre ‘Verdes’ y ‘Pijaos’. Un
encuentro que siempre ha sido especial para los jugadores e hinchas que siempre
querrán ganarlo.
Desde aquella final en junio de 2018, se ha gestado
cierta rivalidad entre los tolimenses y antioqueños. Pero esta ha sido especial
para el ‘Vinotinto y Oro’ que ha logrado algo sin precedentes, ganarle seis partidos
de manera consecutiva con la particularidad que cuatro han sido en el Atanasio
Girardot, un hecho único e histórico.
Esta victoria como todas tiene un sabor especial, pero
hay que resaltar que para este encuentro los dirigidos por Alberto Gamero vienen
haciendo un campeonato irregular con muchos altibajos, pero que poco a poco
parece ir encontrando el engranaje del equipo. Algo que empieza a tranquilizar
a la hinchada al ver que el equipo empieza a lograr resultados importantes.
La ida de los cuartos de final de la Copa Águila es el
mejor partido en cuanto a lo táctico que ha jugado Deportes Tolima este
semestre. Se vio un equipo sólido y ordenado durante todo el encuentro, que
hizo ver incomodo al local que no se vio claro en la generación de juego. Y siendo
fieles al estilo de juego los ‘Pijaos’ concretaron la que tuvieron.
Se reconoce el trabajo del equipo con 4-3-2-1 y 4-3-3 por
momentos que ha planteado Alberto Gamero y que los jugadores asimilan y
entienden perfectamente. Aunque hoy no hubo generación de juego, lo cual era lógico,
ya que el local es el que iba a proponer y el ‘Vinotinto y Oro’ jugaría a
esperar y contragolpear.
La zaga de defensiva se sigue consolidando. La pareja Julián
Quiñones y José Moya está rindiendo y lo más importante sacando el arco en cero y ganando. Los laterales Nilsón Castrillón y Leyvin Balanta bien en materia
defensiva, prioridad en el encuentro ante los ‘Verdes’.
El mediocampo hizo una gran labor durante los 90’, la incorporación
de Bernaldo Manzano como volante cinco que rindió y cumplió. Carlos Robles y
Larry Vásquez jugaron como interiores siendo importantes en la ida y vuelta en
el trámite del partido.
El tridente ofensivo cumplió con la presión alta, que obligaba
al Atlético Nacional a jugar largo, en lo que Deportes Tolima aprovechaba para
hacerse a la posesión de la pelota y así empezar a generar la contras por la bandas
con Anderson Plata y con Alex Castro, por donde luego llegaría el gol.
Alberto Gamero sigue demostrando que conoce perfectamente
su nómina y que estudia a los rivales a enfrentar. Las variantes que realizó dieron resultado, con el ingreso de Omar Albornoz se ganó desborde y velocidad
por la banda izquierda. Y Jorge Luis Ramos, un delantero con talla y buen juego
aéreo que puede ser un buen revulsivo si Diego Valdés no se toma confianza.
Aunque hay que hacer mención de algo atípico en Atlético
Nacional, la lesión de tres jugadores que sin duda afectaron el cuarteto defensivo
y quedo vulnerable ante los cambios e improvisaciones que debió hacer el equipo
‘Verde’. Pero esto, no debe minimizar la victoria conseguida por los de Ibagué,
ya que son acciones de juego fortuitas.
Este triunfo debe ser el inicio de una gran racha para
los ‘Pijaos’, que sin duda siguen haciendo historia. Es una llave que hay que
trabajar en Ibagué, donde será un gran partido en el que hay que salir a buscar
el partido y así lograr la clasificación a semifinales de esta competición a la
cual hay con que apostarle y soñar.
La victoria es un aliciente para el grupo en materia
colectiva. Ahora hay que ratificar el buen juego de hoy ante Atlético Huila en
ese doblete de clásicos del ‘Tolima grande’, al que hay que sumar para reafirmase
entre los ocho clasificados.
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